miércoles, 12 de enero de 2011

LA SEXUALIDAD

La sexualidad es la forma en que cada uno nos manifestamos según nuestro sexo y se va a desarrollar durante toda nuestra vida

En ella están involucrados aspectos físicos, emocionales, mentales, sicológicos, sociales, culturales y religiosos:
Físicamente: Porque nuestro cuerpo va a empezar a realizar funciones especiales según nuestro sexo, que tienen que ver con la capacidad reproductiva y que van a definir las características exteriores de nuestro cuerpo.
Mentalmente, porque nuestro cerebro va a empezar a desarrollar funciones que de niños no teníamos y que nos van a permitir aprender cosas más difíciles y a tener la capacidad de reflexionar y tomar decisiones de forma más racional, es decir mejor pensadas.
Emocionalmente, porque vamos a determinar nuestra forma de manejar los sentimientos, emociones, actitudes, pensamientos y deseos basados principalmente en los valores que nuestros padres, maestros y en general la sociedad nos han inculcado y los que hemos adquirido de forma individual durante nuestra infancia.
Sicológicamente, ya que tendremos la oportunidad de elegir y establecer nuestra forma de comportamiento y por ello tenemos la capacidad y el derecho de decir sí o no, a cualquier situación de nuestra vida, así como de la forma en que vamos a poder manejar cada situación, éxito o fracaso que se nos presente.
Socialmente, porque convivimos con los demás y las formas de relación entre todos, establecen también el tipo de personas que somos o que queremos ser y en este sentido nuestra sexualidad tiene muchísimo que ver.
Sexualmente y quizá en la adolescencia este es uno de los aspectos más importantes, porque el comportamiento, las sensaciones, sentimientos, deseos e impulsos, tienen que ver de forma determinante con los cambios que se están experimentando, con lo que se ha aprendido y con la forma en que se desea manifestar.
Pero como la sexualidad es muy propia, es decir solamente de uno, el ejercicio o forma de manifestarla también es muy particular, aunque involucra a tu pareja, amigos y amigas, familia y a todas las personas que te rodean y es por ello que no podemos esperar que todas las personas la manifiesten como uno. Si comprendemos esto podremos respetar la individualidad de todos y evitarnos muchos problemas ya que tenemos que aceptar a cada quien como es, siempre y cuando no nos lastime y en tal caso, tenemos la capacidad de alejarnos de todo lo que nos haga daño.
El caso es que como estás viviendo una etapa de nuevas emociones y sensaciones, hay que tener cuidado con nuestro comportamiento sexual y reflexionar antes de actuar para tomar una decisión que no comprometa tu salud, tu vida, tu libertad o tu desarrollo personal, como puede ser el tener un embarazo durante la adolescencia o contraer una enfermedad sexual que te afecte durante toda tu vida.
Lo mejor de todo es que tú tienes la capacidad para decidir y controlar tus impulsos, deseos y la forma de atracción sexual que sientes por otras personas.
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